La relación entre la ciencia y las políticas públicas siempre ha sido controvertida. Por un lado, la ciencia tiene una dinámica orientada por el razonamiento científico, mientras que las políticas públicas están orientadas por la lógica competitiva del juego político. La siguiente presentación fue desarrollada respondiendo cuatro preguntas principales: la primera; ¿qué tipo de ciencia debe ser escuchada?”, la segunda, ¿quién debería escuchar qué?, la tercera, ¿aquellos que deberían escuchar realmente lo hacen?; y la cuarta, ¿deberían los científicos deberían involucrarse en la política?